Dos mujeres fueron las protagonistas de un impresionante escándalo al interior de un restaurante de comida rápida en la ciudad holandesa de Ámsterdam.
Las clientas que habían salido de una fiesta reaccionaron con violencia contra los empleados del establecimiento, a quienes les lanzaron comida, bebidas y todo lo que encontraron a su alcance.
Las jóvenes señalaban que no fueron atendidas de la mejor manera. Tras el bochornoso incidente, las mujeres fueron arrestadas.