A sus 46 años, Felipe VI fue proclamado rey de España en el Congreso de los Diputados. Así, el sucesor de Juan Carlos I se convirtió en el monarca más joven de Europa. Quien tomó juramento al nuevo Rey fue el presidente de la Cámara, Jesús Posada.
En su discurso de proclamación, Felipe mostró su profunda emoción ante la etapa que inicia hoy y aseguró que se enfrenta con la mayor esperanza en el futuro de España. El nuevo monarca apuesta por una monarquía renovada para un tiempo nuevo.
El Rey Felipe VI, además, rindió un homenaje de gratitud a su padre, Don Juan Carlos I, por su reinado "excepcional" y por haber convocado a los españoles a un gran proyecto de concordia que ha dado lugar a los mejores años de nuestra historia contemporánea.
"El Rey debe atenerse al ejercicio de las funciones que constitucionalmente le han sido asignadas", refirió Felipe. "No tengan dudas de que sabré hacer honor al juramento que acabo de pronunciar. Encontrarán en mí a un jefe del Estado leal y dispuesto a escuchar y a defender siempre los intereses generales", finalizó.