Usando mazos, martillos, una excavadora y explosivos, miembros del grupo Estado Islámico destruyeron las ruinas de la antigua ciudad asiria iraquí de Nimrud, ubicada cerca del bastión terrorista de Mosul y perteneciente al siglo XIII a.C., según mostraron imágenes de Internet.
Los ataques se suman a otros perpetrados por los yihadistas, los cuales han horrorizado a arqueólogos y al propio secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, que calificó la destrucción de Nimrud de “crimen de guerra”, en el mes de marzo.
En la grabación difundida la noche del sábado, se muestra a los terroristas derribando enormes relieves de alabastro que representan a asirios y deidades, mientras una excavadora echa abajo paredes y, con barriles llenos de explosivos, destruyen tres zonas separadas.
“Dios nos ha honrado en el Estado Islámico para eliminar a todos estos ídolos y estatuas que han sido adoradas en lugar de Alá en los últimos tiempos”, dice un sujeto. Otro asegura: “cada vez que tomemos un pedazo de tierra, vamos a eliminar señales de idolatría y a difundir el monoteísmo”.
Los terroristas, que actualmente controlan un tercio de Irak y la vecina Siria en un autoproclamado califato, han arrasado reliquias como la ciudad iraquí de Hatra, Patrimonio Mundial de la UNESCO, basándose en su distorsionada interpretación fundamentalista de la ley islámica.
Las autoridades también creen que han vendido piezas en el mercado negro para financiar sus campañas. En tanto, un funcionario del Ministerio de Antigüedades iraquí, desde el anonimato, confirmó que todos los elementos de Nimrud eran auténticos.
Ya el mes pasado autoridades iraquíes así como de las Naciones Unidas alertaron que el lugar había sido saqueado y dañado. Foto: captura.