Agentes de la División de Investigación de Delitos Contra el Estado intervino una galería donde se encontraron gran cantidad de celulares reportados como robados y de dudosa procedencia.
Este establecimiento que funcionaba bajo la fachada de una tienda de reparación y venta de accesorios para teléfonos no contaba con licencia de funcionamiento.
Además se encontraron tablets, las cuales tenían programas que eran utilizados para el cambio de IMEI y el flasheo.