Cientos de personas se aglomeraron en el paradero de Puente Nuevo y formaron largas colas para tratar de abordar cualquier bus de transporte que los lleve a su destino.
Sin respetar las medidas de distanciamiento físico, varias personas se empujaban entre ellos para poder ingresar a los vehículos públicos debido a que la cantidad de aforo se había reducido en un 50%.
Además, se evidenció una falta buses en el servicio de transporte público, pues las personas tuvieron largos periodos de espera, por lo que ocasionaron un mayor desorden en el lugar.