De acuerdo a los estudios del Instituto Nacional de Salud, la variante Delta en nuestro país tardó entre 4 a 5 meses para convertirse en la variante preponderante, un tiempo muy similar al resto de países en Suramérica, a diferencia de Europa y Asia donde la variante Delta cobró fuerza en solo dos meses.
El Instituto Nacional de Salud (INS) es uno de los principales en aportar información importante sobre el coronavirus y el desarrollo de las variantes detectadas en el Perú, en medio de un silencio epidemiologico y las posibilidades de una tercera ola de contagios en el país.
Una de las variantes que más preocupaba por su capacidad de resistencia ante las vacunas disponibles, era la variante Mu, sin embargo, con la llegada de la variante Delta ha perdido fuerza.
La variante Delta se ha convertido como la predominante en nuestro país por su capacidad de transmisión, una variante altamente infecciosa que se presenta en el 90 % de los pacientes internados por COVID-19 en Perú.
