Mientras la presidenta Dina Boluarte guarda silencio sobre el paradero de su hermano Nicanor Boluarte, el premier Gustavo Adrianzén se pronunció y señaló un uso político del caso para intentar vincular a la presidenta en una presunta organización criminal, lo cual, en su opinión, podría conducir a una posible vacancia.
CONGRESISTAS OPINAN
Algunos congresistas, como Arturo Alegría y Carlos Anderson, consideran que Adrianzén comete un error al defender a Boluarte públicamente. Señalan que su rol como premier no le permite cuestionar decisiones judiciales.
El 19 de noviembre, antes de que se emitiera oficialmente la orden de detención, el ministro del Interior, Juan José Santibáñez, evitó responder directamente sobre el paradero de Nicanor Boluarte, alegando que la Policía solo interviene cuando existe un mandato judicial.
Sin embargo, el exjefe de la Dircote, José Baella Malca, afirmó que Santibáñez pudo haber utilizado organismos de inteligencia para localizarlo antes de la orden judicial, subrayando que esta omisión podría ser vista como una decisión política.
