Alejandro Toledo, permanecerá bajo arresto domiciliario en Estados Unidos, luego que el juez de la Corte del Distrito de Norte Carolina, Thomas Hixson, denegara hoy la petición de la Fiscalía para que el ex mandatario permanezca en prisión hasta que la Secretaria de Estado de EE.UU, defina su extradición al Perú.
A través de su resolución, el magistrado, descartó que exista un riesgo de fuga dado que el deterioro tanto de la salud de Toledo Manrique como la de su esposa, Eliane Karp, 'mitigan' esta posibilidad.
“El Tribunal considera que el deterioro del estado físico de Toledo y su esposa mitiga aún más el riesgo de fuga. Ambos necesitan un tratamiento médico continuo, y se encuentran en una situación de vida estable en la que pueden obtenerlo”, se lee en el documento.
En ese sentido, Hixson dio razón a la defensa de Toledo, que alegó que el exjefe de Estado, de 75 años, no puede ingresar a prisión porque a su edad es más vulnerable a contraer COVID-19, además de que la cárcel sería “perjudicial para su salud mental”.