Día histórico para el país. Con 103 votos a favor, 14 en contra y una abstención, el Pleno del Congreso de la República aprobó en segunda votación el dictamen de reforma constitucional que establece eliminar la figura de la inmunidad parlamentaria.
Esta modificación constitucional, elimina el beneficio con el que contaban todos los congresistas para que no puedan ser procesados judicialmente, ni apresados sin la autorización previa del Congreso o la Comisión Permanente, desde que son elegidos hasta un mes después de que terminen sus funciones.
El presidente de la Comisión de Constitución, Luis Valdez, durante su exposición señaló que se han lanzado “graves y justificadas acusaciones morales” contra el Legislativo, debido a inconductas funcionales y letargos en el levantamiento de esta prerrogativa.