Cerca al puente Puno, en Ica, un operativo de rutina terminó en un escándalo cuando policías de la comisaria intervinieron un auto en el que viajaba una agente vestida de civil.
Cuando solicitaron a los pasajeros identificarse, la mujer que iba a bordo empezó a increpar a quien era su colega. “¿Cuál es mi nombre? está en tu sistema ¡Mi amor, yo soy policía!”, respondió la mujer.
“Yo quiero que me diga usted, ¿cuál es el problema que un pasajero tenga acá una botella escondida?”, le respondió desafiante al efectivo policial. La suboficial Sandra Neyra, quien estaría en aparente estado de ebriedad junto a sus otros acompañantes, se mostró altiva con la policía, pese a que los otros ocupantes intentaron calmarla.
ACUSA A SUS COLEGAS DE ABUSO DE AUTORIDAD
Pese a que sus acompañantes intentaban retenerla y que obedezca a sus colegas, la suboficial descendió del vehículo, increpó y le quitó el celular al efectivo que le estaba tomando los datos.
“A ver, graba, ¿no? mira, el alférez no está digitando ningún DNI. Es abuso de autoridad. ¡Pon la denuncia por abuso de autoridad ahora, vamos a la comisaria!”, acusó al agente. Cuando éste le recriminó por no dejarle hacer su trabajo, la mujer continuó con sus acusaciones: “Es que usted está cometiendo abuso de autoridad porque no está digitando, ¡digite mi DNI!”, espetó la policía en aparente estado de ebriedad.