Los vecinos del barrio Aranjuez, en Cajamarca, se armaron con palos y quemaron llantas para defender sus viviendas, de esta manera impidieron ser desalojados por segunda vez, en medio de una tensión que estuvo a punto de terminar en un enfrentamiento con la Policía.
Según los vecinos, la familia que pretende desalojarlos habría presentado documentos falsos para ganar un proceso judicial del desalojo de toda una manzana, con lo cual más de 60 familias se quedarían en la calle.
SUSPENSIÓN TEMPORAL
Los encargados del desalojo llevaron una máquina pesada para remover las paredes, pero se encontraron con decenas de pobladores dispuestos a todo por evitar lo que consideran una injusticia.
Ante esta situación de peligro, por falta de garantías, el desalojo se dio por suspendido hasta nuevo aviso.