Cientos de peruanos se encuentran en medio de la pobreza extrema y sin los servicios básicos a pesar de vivir en regiones donde el dinero para ejecutar obras sí existe.
Se trata de una dura realidad de millones de peruanos que hasta hoy, no pueden tener una vida digna debido a que, sus autoridades regionales o locales no utilizan el dinero proveniente del canon minero o del propio presupuesto asignado por el Ejecutivo.
Para el economista Diego Macera, el sector público ya ha demostrado de forma contundente la poca capacidad que tiene para administrar sus propios recursos.
Un ejemplo de la casi nula ejecución del presupuesto es Huancavelica que apenas llega al 5.7 % en lo que va de este año. La ciudadanía ha reportado deficiencias en la obra de saneamiento de agua y desagüe en el distrito de Pampas en Tayacaja, proyecto en el que se gastó S/ 11.000.000 millones entre el 2011 y 2013, pero en la actualidad solo tienen agua durante dos horas al día.
La historia se repite en Cajamarca donde existe un importante canon minero, pero el dinero no se usa. Los vecinos de la provincia de San Marcos afrontan problemas en los servicios de desagüe y falta de pistas asfaltadas, pese a las solicitudes hechas a la Municipalidad Provincial.
OBRAS PARALIZADAS A NIVEL NACIONAL
En esta problemática de deficiente gasto público no se salva tampoco las universidades nacionales.
Para la politóloga y experta en gestión pública, Denisse Rodríguez, el problema se inicia en la formación de los partidos políticos.
En nuestro país hay al menos 900 obras paralizadas solo en el ámbito nacional y regional, de acuerdo a los reportes de la Contraloría General de la República. Si se tiene en cuenta los proyectos de nivel provincial y distrital, se podría registrar 6.000 mil obras abandonadas.