La extrema pobreza y los millonarios proyectos mineros son dos realidades opuestas que conviven en más de una región de nuestro país. Decenas de personas pensarían que los tributos pagados por estas grandes compañías son la herramienta principal para erradicar la pobreza, pero la realidad muestra otra situación.
De acuerdo a cifras del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú, en las regiones de nuestro país solo se ejecuta el 70 % del presupuesto relacionado con el canon minero, por lo que hay 30 % que no es aprovechado.
Para el experto en obras de infraestructura, Raúl Delgado, este problema radica en la falta de eficiencia y transparencia de las autoridades regionales.
Regiones como Áncash, Apurímac, Arequipa, Cajamarca, Cusco, Junín, Moquegua o Tacna tienen una actividad minera importante pero las brechas sociales son enormes.
OBRAS PARALIZADAS
Según datos de la Contraloría General de la República, en la actualidad hay 294 obras de infraestructura paralizadas en las regiones antes mencionadas, equivalentes a 4 mil 831 millones de soles.
Para el economista y miembro del equipo técnico de Juntos por el Perú, Pedro Francke, los tributos de la minería deberían ser mayores.
Una particularidad del canon minero es que a diferencia del presupuesto asignado por el Ejecutivo, éste no se devuelve y permanece en el Gobierno Regional o local. Los Gobiernos subnacionales siempre tienen disponible el dinero proveniente del canon minero, pero no se utiliza eficientemente.
Sin embargo, los especialistas explican que no solo hay un manejo ineficiente del canon minero y las regalías, sino del presupuesto asignado por el Ejecutivo. Un ejemplo de esto es Huancavelica donde resultó ganador el candidato presidencial Pedro Castillo, el presupuesto institucional modificado de la región es de 338 millones 934 mil 922 soles, pero a pesar de contar con ese dinero, en lo que va del 2021, solo ha gastado el 5.7 %.
En Cajamarca, donde Pedro Castillo es líder absoluto, el presupuesto es de 506 millones 149 mil 421 soles y también se ha ejecutado solo un 5.7 %. Mientras que en Pasco ha gastado solo 6.4 %, Puno 10.1 % y Arequipa y Áncash apenas llegan al 11 % de ejecución de un dinero recibido fuera del canon minero.
Solo en el año 2020, las transferencias canon fueron de 2 mil 619 millones de soles en todo el Perú.