La falta de infraestructura, televisión, radio, internet y demás tecnologías no han sido impedimento para que el docente Milko Correa, cabalgue y camine varias horas para poder dictar clases a sus alumnos que viven en las zonas alejadas de la provincia de Ayabaca en Piura.
Su vocación de servicio y pasión por compartir el conocimiento, lo llevó a montar un caballo blanco, recorrer kilómetros de trochas inaccesibles por más de dos horas con el único objetivo de entregar material didáctico a los estudiantes e impartir conocimientos en medio de la pandemia.
El profesor Milko, se las ingenió para conseguir unas bocinas, una computadora y demás materiales, para acceder a los programas educativos emitidos por el Estado como "Aprendo en casa" y retransmitir las clases de matemáticas, lenguaje, historia y geografía.
Los padres de familia agradecieron esta iniciativa del docente y pidieron ayuda al Estado peruano para que sus hijos no pierdan el año escolar. Sin embargo, a este problema también se sumó el abandono de las instituciones para que sus pequeños no estudien en la calle como lo vienen haciendo hasta ahora.