Balazos, cartas extorsivas, amenazas y muerte han puesto en jaque al gremio de transportistas de Lima Norte. El reciente homicidio de Jair Miller Chuquimia, chofer de la empresa Nueva Estrella, fue el detonante que llevó a los transportistas a paralizar sus labores y salir a las calles en protesta.
Conductores, cobradores y trabajadores de empresas como Sesosa, Vipusa y Nueva Estrella marcharon acompañados por personal de la Policía Nacional, incluidos agentes del Grupo de Intervención Rápida (GIR).
Avanzaron por kilómetros de la Panamericana Norte, con los rostros cubiertos por temor a represalias. A pesar de que la marcha fue organizada de manera pacífica, la situación se descontroló cuando algunos buses de otras líneas continuaron operando. Los manifestantes rompieron los espejos de los vehículos y obligaron a los pasajeros a bajar.
COMUNICADO DEL MINISTERIO DEL INTERIOR
El Ministerio del Interior emitió un comunicado señalando que el ministro Juan José Santiváñez había sostenido reuniones con representantes del gremio de transportes, sin embargo, los manifestantes aseguraron que no han tenido contacto directo con las autoridades y anunciaron que este jueves marcharán hasta el Congreso.
