Familiares de Jesús Santos Victorio Acuña, tío político de Jackeline Salazar, se congregaron frente al Poder Judicial de Lima Norte, en Los Olivos, para exigir su libertad y clamar su inocencia, acusándolo erróneamente como cómplice en el secuestro de la empresaria.
Como se recuerda, el Ministerio Público ha solicitado 18 meses de prisión preventiva contra Jesús Santos Victorio Acuña y su hijo Jesús Abraham Victorio Vallejo, tío político y primo, respectivamente, de Jackeline Salazar Flores, quien fue secuestrada el pasado 13 de mayo por una banda de delincuentes en el Instituto de Los Olivos.
Joaquín Victorio, hermano de Jesús Santos Victorio Acuña, señaló que no tienen ninguna implicancia en el secuestro de la empresaria, recalcando además que no tienen ningún parentesco que los relacione como familia.
“No tenemos ningún vínculo con la familia de Jackeline. Con su papá nos conocemos porque somos paisanos, de la misma provincia”, señaló.
REAFIRMAN INCIDENCIA
Joaquín afirmó que su hermano Jesús no tiene nada que ver en el secuestro de la empresaria. No obstante, deslindó de las responsabilidades que implican a su sobrino Jesús Abraham Victorio, quien ha confesado ser uno de los que planificó el secuestro de Salazar Flores.
“Si mi sobrino tiene que pagar, que pague, pero mi hermano no tiene nada que ver. La policía lo sabe porque ellos han investigado, pero como se ha vuelto un tema mediático, se quieren lavar las manos. La policía tiene conocimiento de cómo sucedieron las cosas”, indicó.
Finalmente, recalcó que su hermano Jesús solo brindó apoyo al padre de Jackeline Flores para que pudieran encontrarla. Además, señaló que las llamadas provenientes de uno de los teléfonos de su empresa habrían sido realizadas por su sobrino Jesús Victorio Vallejo, quien es trabajador de la funeraria propiedad de Jesús Santos Victorio.
“Mi hermano compró teléfonos para todo el personal de trabajo y uno de esos teléfonos lo tenía mi sobrino porque él trabaja en la funeraria”, recalcó.
