Vecinos del balneario La Herradura, en el distrito de Chorrillos, se encuentran cansados de las constantes fiestas nocturnas y de la habitual práctica de carreras de motos en la playa, actividades que perturban la paz del vecindario.
El malecón de La Herradura se ha convertido en el centro de encuentro para decenas de motociclistas, quienes, desafiando las leyes y la seguridad, se reúnen frecuentemente para realizar piruetas en medio de la oscuridad.
Además de los piques, las fiestas nocturnas se han vuelto una constante, donde el consumo excesivo de licor hasta el amanecer es el modus operandi. La música y los ruidos han afectado la tranquilidad y el bienestar de los residentes.
PIDEN APOYO A LAS AUTORIDADES
A pesar de contar con un cartel que prohíbe el consumo y venta de licor en el lugar, la falta de fiscalización ha permitido que estas prácticas se realicen. Por lo tanto, los vecinos hacen un llamado a las autoridades para una mayor presencia policial.