Han pasado 13 días desde que la refinería La Pampilla ocasionó el mayor desastre ecológico en las playas de Ventanilla tras el derrame de al menos 6 mil barriles de petróleo.
Los vendedores de sombrillas, bloqueadores, trajes de baño y hasta de comida, que esperaron con ansias la llegada del verano, se han quedado sin trabajo por lo que piden al Gobierno ser incluidos en la entrega del bono.
Entre los perjudicados se encuentra la señora Victoria, una adulta mayor que pese a su avanzada edad es el único sustento de su hogar. Con lágrimas en los ojos esta mujer pide ser escuchada ya que no tiene otro lugar donde vender. Otros vendedores como Bernardo Salazar se han quedado sin dinero para alimentar a sus seres queridos.
El alcalde de Ventanilla, Pedro Spadaro, asegura que Repsol deberá terminar la limpieza en menos de 8 días tal y como lo estableció el Ministerio del Ambiente.
Además, tras confirmarse el segundo derrame de petróleo de parte de esta refinería, la autoridad distrital solicitará la suspensión de labores de esta empresa.
Y sobre el bono para los comerciantes, el alcalde confirmó a Panamericana que la propuesta ya ha sido entregada al presidente Pedro Castillo, quien deberá tomar una decisión en los próximos días.