Diversos negocios de la avenida Camino Real, en el distrito de Santiago de Surco, se han convertido en el nuevo blanco de la delincuencia.
Con armas en mano, tanto clientes y comerciantes han sido amedrentados. Una de sus víctimas es la dueña de una bodega, quien fue golpeada y arrastrada por el suelo al tratar de resistirse a un asalto.
Sin embargo, no sería la única vez. En otro momento, cámaras de seguridad del negocio también registraron a un mototaxi que se estaciona y del cual bajan tres personas. Uno de ellos saca un arma que llevaba escondida, mientras sus cómplices ingresan al lugar para perpetrar su accionar. El hecho se produjo al promediar las 3:30 de la tarde cuando la dueña se encontraba en compañía de sus menores hijos.
De igual manera, otros comercios de la zona se han visto perjudicados. “Nos han asaltado, nos han amarrado las manos, los pies, la boca, todo”, manifiesta una segunda agraviada.
En tanto, las víctimas presumen que se trataría de la misma banda de asaltantes, pues una trabajadora de los negocios afectados habría reconocido a uno de los delincuentes.
Asimismo, los afectados denunciaron que estos maleantes vivirían cerca al lugar de los atracos. “El problema es que todos los que asaltaron son de esta zona, son conocidos de la zona, viven por aquí”, precisaron.
Para el especialista en seguridad, César Ortiz, la tarea de apoyar a las autoridades pertinentes en la lucha contra la delincuencia recae en las municipalidades, las cuales deberían tener cámaras de seguridad, agentes de serenazgo, pero además de sistemas sobre cómo actuar.
Finalmente los propietarios de los negocios y clientes perciben que están en constante peligro y por tal motivo exigen a la Policía tome cartas en el asunto.