Ante el sofocante calor, cada verano las calles del Callao son invadidas por piscinas portátiles; sin embargo, este acto deberá desaparecer dado que el municipio decomisará y multará con 4 150 soles a las personas que falten a esta regla.
Según el gerente de Medio Ambiente del Municipio Provincial del Callao, Doyle Acosta, esta medida busca cuidar la salud de los vecinos chalacos. “Las aguas de las piscinas al no tener circulación produce microbios, esto podría generar enfermedades como la chikungunya, el sika o el dengue”, explicó. Asimismo, el funcionario aseguró que las piscinas armables invaden la vía pública obstruyendo el tránsito vehicular y peatonal.
Cabe señalar que los encargados de realizar los operativos y garantizar que se cumpla la ordenanza serán los fiscalizadores, serenos municipales y de ser necesario los agentes de la Policía Nacional del Perú.