Se han convertido en una de las principales formas de transportarse en la ciudad, pero sin control ni fiscalización. Las aplicaciones de taxis de diversas empresas no pagan impuestos ni tienen sede de oficinas en nuestro país.
Se estima que en Lima circulan unos 100 000 vehículos que brindan este servicio y realizan al día más de 2 millones de viajes.
De los 3 millones de servicios al día usando taxis convencionales en la capital, los viajes por aplicativo representan más del 60%. Para Luis Quispe Candia, presidente de la ONG Luz Ámbar, ello contribuye a la congestión vehicular, además de ser una competencia desleal.
Este servicio es considerado ilegal y Luz Ámbar ofrece como alternativa la creación de un registro de estos taxistas bajo las características del taxi remisse. En la capital existen aproximadamente 90 mil taxis inscritos en los padrones del municipio de Lima, y cerca de 70 000 taxis informales.
Los usuarios destacan las ventajas de un servicio por aplicativo pero toman sus precauciones. Ante los constantes casos delictivos en taxis por aplicativo, las autoridades buscan regular este servicio.