Ambulantes informales del distrito de La Victoria se agarraron a golpes al disputarse un espacio en la vía pública. En medio de la discusión se observa a una señora que viste de amarillo, pateando y empujando a la dueña de un triciclo que llegaba.
Según manifiestan los comerciantes, los vendedores que tienen vestimenta amarilla cuentan con autorización para trabajar en la vía pública, ellos tienen que enfrentarse a otros ambulantes que no tienen sitio estable en las calles.
La venta ambulatoria implica desorden en las calles y riesgo para las personas que salen a realizar sus compras.
Cada vez se observa con más frecuencia imágenes como éstas en las que las calles son vistas como trofeos de batalla.