Era el año 1995 cuando 25 terroristas del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru, (MRTA), se enfrentaron con militares y policías librando una guerra feroz en la Alameda del Corregidor, en La Molina.
Isabel Rengifo, periodista de Panamericana Televisión, narraba todo lo que ocurría ante sus ojos y los de su camarógrafo. Aquella noche, su equipo captó imágenes exclusivas que dieron la vuelta al mundo.
Los terroristas en su afán de huir, dinamitaron las paredes de toda la cuadra pasando de casa en casa por un forado, hasta que finalmente se vieron cercados en una de las viviendas. Al amanecer se dio la negociación entre Miguel Rincón Rincón, cabecilla del MRTA y agentes de la Dincote, el garante fue el equipo de periodistas de Panamericana Televisión.
Al interior de la vivienda habían tomado una familia entera como rehén, entre ellos, una niña. Los sujetos tenían fusiles, granadas, y otros explosivos que estaban dispuestos a activar. Horas después, con el acuerdo hecho, salieron los emerretistas y con la familia un altivo y sonriente criminal, Miguel Rincón Rincón.
En la casa de La Molina donde se alojaban los terroristas entre ellos la estadounidense Lori Berenson Mejía, la policía halló un plano y una maqueta del Congreso de la República, lugar donde planeaban perpetrar su próximo ataque. La norteamericana se había hecho pasar por periodista de una cadena internacional para ingresar al Parlamento más de una vez.
Aquella noche dos civiles murieron. Tiempo después los terroristas fueron sentenciados a cadena perpetua, sin embargo, mediante apelaciones y beneficios penitenciarios muchos de ellos hoy se encuentran en libertad.