Sandra Minaya Muñoz fue sometida a diversos cuestionamientos y exámenes que la humillaron sin contemplación al confundirse cápsulas de droga con gases estomacales.
Sin posibilidad alguna de defenderse y siendo señalada como burrier, la joven pidió hacer una llamada telefónica a sus padres que se encontraban en el extranjero.
El fiscal de la nación Pablo Sánchez fue consultado respecto a este caso y a pesar de los serios cuestionamientos dijo sentirse satisfecho con las explicaciones de la fiscal.
Como era de esperarse esta respuesta ha indignado aún más a la joven afectada.
Las pruebas médicas arrojaron que Sandra Minaya jamás consumió cápsulas de droga, sin embargo y pese a que el Viceministro del Interior ha aceptado que cometieron un error, parece ser que para la fiscalía haber tenido dos días a una joven privada de su libertad y dejando de lado la presunción de inocencia, fue lo correcto.