El Gobierno boliviano ha decidido enviar tropas a la frontera con Perú para hacer frente al contrabando que ha aumentado en las últimas semanas, particularmente en el área del puente Desaguadero.
Esta acción se produce en medio de una crisis de escasez de productos de primera necesidad en Bolivia, donde comerciantes han culpado a Perú por la situación.
El Ejército boliviano está implementando controles en la zona para interceptar el tráfico ilegal de mercancías. El presidente Luis Arce ha anunciado esta medida como parte de un conjunto de acciones destinadas a combatir el contrabando.
EXIGEN MEDIDAS
Los comerciantes y ciudadanos bolivianos han exigido estas medidas debido al encarecimiento de los alimentos en su país.
Las autoridades han señalado que el objetivo es prevenir "el contrabando a la inversa", lo que podría llevar a consecuencias adversas para Perú, especialmente en regiones como Puno, Arequipa, Cusco y Tacna, que dependen del abastecimiento de ciertos insumos.