En menos de un mes y en plena crisis sanitaria mundial por la COVID-19, nuevamente India fue azotada por un fenómeno natural.
Se trata del ciclón Nisarga que tocó tierra por el estado occidental de Maharashtra, cuya capital es Bombay, donde también causó estragos. No llegó solo pues vino acompañado de fuertes lluvias y vientos de hasta 120 kilómetros por hora que dejaron árboles caídos.
Mientras tanto una cuarta parte de la ciudad de Venecia quedó inundada producto de la marea alta. Si bien esto no es común durante esta época del año, se presume que una tormenta en el océano Atlántico que provocó intensas ráfagas de viento y lluvias en el norte de Italia, desencadenaron esta situación.