Los estudiantes del nivel secundario de la ciudad de Wuhan, ubicada en China y considerada como el punto donde inició la pandemia del COVID-19, regresaron a clases, pero bajo ciertas medidas sanitarias.
Por ejemplo ahora predomina el distanciamiento social, el uso de mascarillas, el control de temperatura y un límite de aforo por cada clase, el cual no debe superar los 25 alumnos, para evitar la propagación de la enfermedad.
Asimismo las autoridades vienen ejecutando simulacros para emular la evacuación de un estudiante que tuviera alta temperatura. Además, nadie tiene permitido salir de la escuela desde las 7 de la mañana que ingresan hasta las 8:00 de la noche que salen.