La excongresista estadounidense, Katie Hill, renunció a su cargo tras verse involucrada en un escándalo, pues según investigaciones ella habría mantenido una relación de carácter sexual con un trabajador del Parlamento identificado como Graham Kelly, algo que está prohibido.
Sin embargo, no ha sido lo único que remeció a esta mujer, considerada como una de las jóvenes promesas de la política en dicha nación, pues también se filtraron fotos donde se la observa besando a otra persona su mismo sexo.
Con respeto a este tema, ella no lo negó, al contrario, reconoció que mantuvo una relación con una colaboradora de campaña, pero esto ocurrió antes de ser elegida legisladora, motivo por el cual no existiría delito.
A raíz de esto la exparlamentaria denunció una campaña de desprestigio y la violación de su privacidad por la filtración de imágenes. Asimismo denunció como artífice de todo este asunto a su esposo, de quien se está divorciando.