Argentina amaneció paralizada por la quinta huelga general convocada por la Confederación General del Trabajo contra el gobierno de Mauricio Macri, que continúa generando descontento en gran parte de la Nación.
Desempleo, aumento de la pobreza y una inflación que alcanzó en abril pasado más del 55% interanual, llevaron a los ciudadanos a las calles donde se registraron algunos incidentes.
La molestia del Gobierno se hizo sentir a través de las declaraciones de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien rechazó que los reclamos sean por problemas sociales.
El paro nacional, considerado hasta ahora como el más fuerte en la era Macri, se produce a solo cinco meses de las elecciones presidenciales, a las que el mandatario aspira postular. Macri confía en un repunte económico que le de un respiro a su gestión.