En un ambiente festivo, turistas y peregrinos de todo el mundo se congregaron en Belén, para celebrar el nacimiento del niño Jesús. Como es costumbre, los scouts palestinos desfilaron al son de gaitas en la plaza del Pesebre.
Además filas de peregrinos se apilaron para poder pasar por la minúscula puerta de apenas un metro de la basílica de la Natividad, la misma que fue construida sobre la gruta donde nació Jesús.
La ciudad palestina de Belén está ubicada en la Cisjordania y ocupada por Israel desde hace más de 50 años, vive la Navidad con mayor movimiento en años y con la situación de seguridad relativamente en calma.