Polémica ha generado la medida que adoptó el Ministerio del Interior de Alemania para reducir el número de refugiados en dicho país europeo.
A través de un programa, se busca la repatriación voluntaria y según detallan medios locales, no solo se costearía el alquiler de los beneficiados en sus respectivas naciones, sino que también recibirían un pago de 2,200 euros.
Cabe mencionar que las personas que se acojan a esta propuesta tendrán que renunciar a sus solicitudes de asilo y cualquier proceso legal que estén llevando para seguir en Alemania. Los interesados en el programa solo podrán acceder a estas facilidades hasta fines del presente año.