Besarse en público o dar muestras de afecto son algunas restricciones que tendrán que asumir hinchas de la comunidad LGTB que asistan al Mundial Rusia 2018, pues sino pagarán una multa de hasta dos mil dólares, arrestos de 15 días o deportación.
Rusia es una sociedad ultraconservadora. Ocho de cada diez personas rechazan las relaciones homosexuales. Desde el 2013, si dos personas del mismo sexo se besan en público se castiga, esto fue contemplado por una ley contra la propaganda homosexual para proteger a los menores, aprobada por el presidente Vladimir Putin.
Es preciso mencionar que pese a la ley vigente, los asistentes a la Copa del Mundo podrán exhibir la bandera del arcoiris LGTB.