Las autoridades colombianas luchan contra el tiempo. Y es que trabajan incansablemente para ubicar a más sobrevivientes tras la gigantesca avalancha registrada en la localidad Mocoa, al suroccidente del país. El presidente Juan Manuel Santos se trasladó hasta el lugar de la tragedia para llevar ayuda humanitaria para los cientos de damnificados.
El desastre se produjo la noche del último viernes tras el desborde de tres ríos. El lodo, piedras y troncos arrasaron con todo a su paso y hasta el momento han dejado un total de 273 muertos. Aún se desconocen las cifras oficiales de los heridos y los desaparecidos, quienes son buscados por personal especializado del Ejército.
"En el Consejo de Ministros hemos declarado la emergencia económica, social y ecológica, para poder efectuar las modificaciones y los traslados presupuestales y adoptar todas las medidas necesarias para atender este desastre", dijo el presidente Santos desde el lugar de los hechos.