El Súper Bowl es uno de los espectáculos deportivos más esperados del año en los Estados Unidos, pero en esta ocasión destacó por las manifestaciones políticas contra las diversas ordenanzas dadas por parte del presidente de ese país, Donald Trump. Este show se llevó a cabo en el NRG Stadium, ubicado en Houston.
Uno de los comerciales que se proyectan durante el evento, se enfocó en las dificultades que atraviesan dos inmigrantes, en este caso una madre y su menor hija, para pisar suelo estadounidense. Finalmente, cuando llegan a la línea fronteriza se topan con un muro. En otro spot publicitario se aprecia a personas de varias nacionalidades, quienes van a acompañados de palabras que incentivan el respeto y la tolerancia hacia cualquier ciudadano, sin importar su lugar de procedencia.
El jugador de fútbol americano y que pertenece al equipo de Los Patriots, Martellus Bennett, expresó que querían que “derriben ese muro”. Allí también estuvo presente la cantante Lady Gaga. La artista inicio su presentación interpretando God Bless America (Dios Bendiga América), pero donde además agregó: “Esta tierra es tuya, esta tierra es mía, esta tierra fue hecha por ti y por mí (…) una nación, bajo un Dios invisible, con libertad y justicia”.
No quedó solo en críticas, la neoyorquina dejó encantado al público asistente con su presentación. Ellos le pedían a gritos varios de sus éxitos. Allí realizó coreografías que seguían en ritmo de sus canciones y que eran acompañados de fuegos artificiales. Cabe precisar que esta es la edición del Súper Tazón más caro de la historia, pues se invirtió una suma cercana a 10 millones de dólares.