Este jueves, el cohete Falcon 9 de la compañía SpaceX del empresario Elon Musk, explotó antes de ser lanzado durante una prueba rutinaria desde una base en Florida, destruyendo un satélite de Facebook.
La explosión fue ocasionada por una anomalía en la plataforma de despegue y no dejó heridos, pero destruyó el satélite de comunicaciones Amos-6 de la compañía israelí Spacecom que sería usado por Facebook para proveer internet a zonas rurales de África.
Por su parte, el creador de la red social, Mark Zuckerberg, quién se encuentra en África, señaló su decepción a través de su perfil de Facebook, además de sentirse afectado por la pérdida del satélite.