Según un estudio realizado por el Instituto de Análisis Social de la Universidad de Michigan, dejar la soltería y convivir junto a un hombre, equivale a trabajar siete horas extra a la semana.
Pero la situación empeora para las mujeres que tienen hijos. Pese a que la incorporación al mercado laboral de la mujer ha obligado a los hombres a cooperar con el cuidado de los niños y las labores del hogar, muchos aún las evitan y trasladan el trabajo a la mujer.
En el caso de los hombres, ellos solo gastan entre dos horas a 30 minutos a las labores domésticas. Además según otro estudio de 2014, muchos hacen mal sus tareas para no volverlas a hacer.
Finalmente el estudio concluye que conversar con la pareja e insistir que los trabajos del hogar son responsabilidad de ambos.