La historia de los narcotraficantes está siempre envuelta de lujos, poder y misterio y son estos mismos factores, los que muchas veces los llevan a arriesgar su vida y colocarla al filo de la muerte. Quién no ha escuchado la historia del más famoso de los narcos de Colombia, Pablo Escobar, su vida ya no es desconocida y ahora sabemos a cada peligro que se enfrentó en su oficio delincuencial antes de encontrar la muerte, pero muchas veces sí que se salvó y hoy podríamos saber por qué. La respuesta no estaría solamente en los sicarios que los cuidaban, sino en algo mucho más oscuro: la brujería. Así lo reveló la policía colombiana, luego de atrapar al narcotraficante, Gustavo Hernán Sepúlveda, quien reveló que el capo acudía frecuentemente donde una bruja, que es la favorita de muchos de estos sujetos que optaban por sus servicios con el fin de evitar la cárcel y cuidar su vida…
Esta mujer, de quien su nombre aún no ha sido revelado por encontrarse bajo investigación, usaba la llamada “magia negra” con animales a quien les ponía el nombre de sus clientes. Pero más grande ha sido la sorpresa de las autoridades, al descubrir que así como esta “bruja”, habrían otros hechiceros que también ofrecen estos “trabajitos”, incluso usando para estos fines a animales inocentes
Según especialistas en psicología, la fe a ciegas de los narcotraficantes en estos brujos, se debería a un fenómeno llamado “heteronomía”, el mismo que incluso provoca que las más grandes decisiones las dejen en manos de estos “adivinos”.