El tradicional balneario paradisíaco de Pucusana enfrenta uno de los más serios problemas de contaminación ambiental. Como se muestra en imágenes, los que abunda en sus playas es claramente basura.
Cabe señalar que en noviembre del año pasado, la Municipalidad de Pucusana emitió una ordenanza en el que prohibía consumir alimentos en las playas; sin embargo, este reglamento fue incumplido y no solo por los veraneantes, quienes continúan comiendo en el lugar sin mayor restricción, sino también por ellos mismos, ya que la comida abastecida en los quioscos es con permiso municipal.
Por su parte, el alcalde del Balneario, Pedro Florián, se defendió señalando que la principal fuente de contaminación no son los veraneantes sino los pescadores foráneos, quienes, según él, no son fiscalizados correctamente por la Dirección General de Capitanías y Guardacostas (Dicapi).