Como se recuerda en los Estados Unidos, primero fueron los inmigrantes nicaragüenses, después los haitianos y ahora los salvadoreños, ahora que el Gobierno de Donald Trump anunció el fin del Estatus de Protección Temporal (TPS en sus siglas inglesas), un programa especial que evita la deportación, para unos 200.000 inmigrantes salvadoreños.
Los ciudadanos salvadoreños acogidos bajo el TPS tendran 18 meses, hasta septiembre de 2019, para salir de los Estados Unidos o conseguir otro permiso de residencia legal para poder quedarse. Si no lo hacen, a partir de entonces, serán considerados inmigrantes indocumentados y podrán ser deportados.
Cabe indicar que este es uno de los golpes más severos de la Administración del republicano a los inmigrantes en Estados Unidos.