Sus lágrimas no eran de tristeza sino de alegría. Estos pequeños tan pronto vieron a sus progenitores se lanzaron a sus brazos para decirles cuanto lo aman y desearles un “feliz Día del Padre”.
Como un regalo anticipado, los miembros de las Fuerzas Armadas destacados en el Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro, recibieron la visita de sus hijos, de quienes se alejaron para luchar por la paz y la seguridad nacional en esa parte del país.
Los miembros del Ejército pasaron un momento especial e inolvidable junto a sus seres queridos. Muchos de ellos no ven a sus hijos por más de tres meses.
El reencuentro estuvo promovido por el ministro de Defensa, Jorge Nieto quien también llegó junto a los pequeños hasta Pichari.