La semana de la Cumbre APEC ha llegado en medio de un contexto de grave inseguridad que afronta el país. A pesar de ser anfitrión de uno de los foros más importantes a nivel mundial, la criminalidad ha alcanzado niveles alarmantes. En las últimas horas, varios actos de violencia, como el asesinato de un empresario en Gamarra y el asalto a un bus con pasajeros a bordo, han dejado una huella de temor y desconcierto entre la ciudadanía.
En plena luz del día, seis delincuentes atacaron a un chofer de transporte público en Santa Anita, arrastrándolo y golpeándolo mientras nadie se atrevía a intervenir por miedo a represalias. En otro hecho delictivo, un ataque armado por presuntos extorsionadores dejó a los pasajeros de un bus tendidos en el suelo. Estas escenas de violencia, captadas en video, resaltan la creciente preocupación por la inseguridad en el país.
A nivel político, el gobierno de Dina Boluarte ha intentado mitigar el impacto de la crisis mediante reuniones con gremios empresariales, pidiendo el apoyo y calma durante el APEC. Sin embargo, el reciente asesinato de un comerciante de Gamarra ha desencadenado un levantamiento de los empresarios, quienes han anunciado movilizaciones para exigir mayor seguridad. Carlos Choque, presidente de la Federación de Empresarios de Gamarra, no dudó en calificar como “antipatriota" la falta de medidas contundentes frente al crimen organizado.
POLICÍAS IMPLICADOS CON “LOS PULPOS”
El problema de la delincuencia se agrava aún más por la implicación de miembros de la Policía Nacional con organizaciones criminales. En Trujillo, fue detenida la suboficial Elizabeth Llaure Fernández, acusada de colaborar con “Los Pulpos”, una de las bandas criminales más peligrosas del país. Este escándalo ha profundizado la desconfianza en las autoridades y agravado la crisis social y de seguridad en el país.