Este miércoles 23 de octubre, un nuevo paro nacional sacudió las calles de Lima, con una participación masiva de ciudadanos que expresaron su hartazgo por la creciente ola de crimen organizado que afecta al país.
Aunque el gobierno intentó minimizar la magnitud de la protesta, afirmando que “uno o dos paros no resolverán el problema”. Desde temprano, la ausencia de transporte público fue evidente, especialmente en avenidas principales como Brasil, Alfonso Ugarte, Universitaria y Túpac Amaru.
Uno de los casos más conmovedores fue el de una madre con su bebé enfermo, quien lamentaba la falta de transporte para llevar a su hijo al hospital Rebagliati. "Nos afecta mucho porque mi bebé está con fiebre", comentó.
COMERCIANTES SE SUMARON A PROTESTA
La protesta no solo se limitó a Lima Norte. Comerciantes de Lima Sur, Este y hasta de Gamarra y Mesa Redonda también cerraron sus puertas en señal de protesta. Algunos testimonios revelaron que los criminales han llegado al punto de exigir hasta aguinaldos para las fiestas.