Diversos países han reforzado sus medidas de seguridad ante las constantes amenazas de ataques terroristas tras los mortíferos atentados del último viernes en Paris.
En Alemania, las autoridades se encuentran trabajando sin descanso para garantizar el bienestar de sus ciudadanos, mientras que Suecia ha elevado su nivel de alerta antiterrorista de tres a cuatro.
Similar panorama se registra en el Vaticano, donde se redobló la seguridad luego que el vocero del Estado Islámico, Abú Muhammad Al-Adnani, asegurara que conquistarían Roma.