A raíz de la violenta respuesta de las autoridades a las manifestaciones contra el presidente Joseph Kabila, que dejaron al menos seis víctimas mortales en la ciudad de Kinshasa el último domingo; el sacerdote jesuita de la República Democrática del Congo, Rigobert Minani, aseguró que la situación en el país es “muy caótica” y que están sufriendo una "represión muy dura".
"La situación es muy caótica, la Iglesia ha estado en la primera línea para tratar de abogar por la democracia", señaló el religioso con gran preocupación. Asimismo, consideró que la cifra de muertos (6), heridos (más de 150) y personas arrestadas (más de 500) en la última protesta, refleja la “represión muy dura” que sufrieron ante una manifestación que considera pacífica.
Tanto la movilización del domingo 21 de enero, como la del 31 de diciembre de 2017, tenían por objeto exigir a Kabila, quien lleva 17 años en el poder, que respete el acuerdo de San Silvestre y que no vuelva a presentarse candidato a las próximas elecciones.
Como se sabe, la Comisión Nacional Electoral anunció que las elecciones se llevarían a cabo el 23 de diciembre de 2018, dos años después de la fecha en que debió celebrarse originalmente. No obstante, asegura Minani, la población no se siente segura de que se celebren los comicios.
“Tenemos la impresión de que la democracia está congelada (…) Hay violencia por todos lados, falta de comida y un brote de cólera en Kinshasa por primera vez en más de diez años”, apuntó.
Cabe precisar que el domingo pasado, el papa Francisco exhortó a las autoridades del país africano a "evitar toda forma de violencia". Ello, durante el rezo del Ángelus en la Plaza de Armas de Lima, el último día de su visita pastoral al Perú.
