Durante un operativo que buscaba el reordenamiento del comercio ambulatorio y el cumplimiento de las medidas sanitarias para evitar el contagio del Covid-19, serenos de la Municipalidad Provincial de Chiclayo, fueron agredidos por algunos vendedores con un martillo, puñetazos y puntapiés en la avenida Arica.
Las autoridades municipales denunciaron la violenta agresión en la comisaría César Llatas y descartaron que se haya estado haciendo decomisos; asimismo, indicaron que buscaban que las personas mantengan el distanciamiento social y verificar que los accesos estén libres en caso de emergencias.
Por su parte, el Jefe de Operaciones de la Subgerencia de Seguridad Ciudadana, Manuel Adrianzen Castro, dijo que seguirán con su propósito de reordenamiento y que este tipo de gente no puede estar vendiendo en ese lugar, ya que son muy agresivas.